¿Qué es mejor Duroc o ibérico?

Buenas, queridos carnívoros y gourmets de los embutidos. Hoy nos sumergimos en el ancestral debate que ha dividido a familias y ha provocado disputas en los grupos de cata: ¿Es mejor el cerdo Duroc o el Ibérico? Vaya tela el asunto, ¿eh? Bueno, pongámonos las botas y adentrémonos en este delicioso misterio.

Primero, conozcamos a los contendientes

El cerdo Duroc

Este animalito de origen americano, rojizo y con unas orejas que más bien parecen dos abanicos, es conocido por su carne sabrosa y jugosa. Además, es todo un atleta del engorde, capaz de ganar peso que ni en tus más locas navidades.

• Rápido crecimiento
• Carne tierna
• Buena infiltración de grasa

El cerdo Ibérico

Por otro lado, tenemos al célebre cerdo Ibérico, con sus patitas negras que hacen que parezcan que siempre van arreglados para una gala. Estos se crían en nuestra tierra, España, disfrutando de las dehesas y dándonos una carne con una textura y unos matices únicos.

• Carne con sabor intenso y profundo
• Excelente para jamones y embutidos premium
• Grasa monoinsaturada beneficiosa para la salud

La jugada de la gastronomía

¿En qué se nota?

Si eres de los que te pones a temblar con un buen plato de jamón, debes saber que el Ibérico y el Duroc se juegan su reputación aquí. La diferencia entre masticar un trocito de jamón de uno o de otro es como comparar un buen chiste con uno malo — el desenlace es completamente distinto.

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Un festín en la parrilla

Y si lo tuyo es el barbacoa Sunday, la carne de Duroc suele ser más amable con el principiante parrillero. No te diremos que no al Ibérico a la brasa, pero requiere su aquel para que te quede de lujo.

La cosa de los precios

Metidos ya en faena monetaria, debemos aceptar que el bolsillo también manda. Si bien el Ibérico es el rey de la calidad, también lo es en cuanto a precio se refiere. Pero hey, tampoco es que el Duroc te vaya a salir regalado, que todo lo bueno se paga.

¿Y la salud qué?

La grasa del cerdo Ibérico tiene un secreto: está repleta de ácido oleico, primo hermano del aceite de oliva. Así que un poquito de esta delicia, aparte de alegrar tus panzadas, también puede ayudar a cuidarte ese cuerpecito que tanto mimas.

Tabla comparativa: ¿Duroc o Ibérico?

Así que ya ves, compinche del buen yantar, que cada uno tiene lo suyo y según el momento, el gusto y la billetera, uno puede ser mejor que otro. ¡Que aproveche!

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