¿Qué engorda más el chorizo o el jamón?

El eterno dilema entre chorizo y jamón

¿No sabes si atacar ese chorizo que te hace ojitos desde la nevera o ir a por el jamón que cuelga en la cocina? Tranqui, aquí estamos para hablar de esos placeres culpables y de paso, despejar dudas. Vamos a resolver el misterio de cuál de estos dos prodigios ibéricos carga más la balanza... ¡literalmente!

¡Redoble de tambores! La respuesta rápida

Pues bien, para cortar al grano y que no te comas más el coco, te diré que generalmente, el chorizo puede tener más calorías y grasas que el jamón. Pero no te vayas aún, que esto tiene miga.

Cuestión de calorías y grasas

Para ilustrar mejor este punto, vamos a echar un ojo a unas tablitas que nos van a aclarar este asunto:

Tabla Nutricional Comparativa

Como puedes ver, el chorizo es algo así como el 'heavyweight champ', un campeón pesado en lo que a calorías se refiere. El jamón, por su parte, es más liviano, pero que eso no te engañe, que también tiene su aquel.

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¿Pero qué es eso de las 'buenas' y las 'malas' grasas?

Es hora de entrar en materia y hablar un poco sobre las grasas, que no todas son malas ni todos los kilos que acumules tienen que ser enemigos:

• Las grasas saturadas son las 'malotas' de la película. Abundan en alimentos procesados como el chorizo, y en exceso son un ticket directo para aumentar tu colesterol malo.
• Las grasas insaturadas, incluyendo mono y poliinsaturadas, son las 'protas' buenas del cuento. Se encuentran en mayor cantidad en el jamón, sobre todo el ibérico, y ayudan a mantener tu corazón contento y saludable.

También está el tema de las vitaminas y minerales

Si vamos más allá de las grasas y las calorías, nos encontramos con que tanto el jamón como el chorizo aportan a nuestra dieta hierro, zinc, potasio y vitaminas del grupo B. Pero claro, el jamón lo hace de una manera más 'delicada'.

¿Qué papel juega la cantidad?

Bueno, hasta el agua engorda si te pasas, así que ojo con las raciones que te metes entre pecho y espalda. Aquí van algunos consejillos:

• No te hagas un bocata de chorizo como si no hubiera un mañana. 'Todo con medida', reza el dicho.
• Con el jamón, aunque sea más 'light', tampoco te montes una fiesta ibérica cada día. Moderación es la clave.

Consejitos para disfrutar sin remordimientos

Si ya te sientes culpable por siquiera pensar en ellos, aquí van algunas ideas para darte el gustazo de manera saludable:

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• Opta por jamón en lugar de chorizo si estás cuidando tu peso.
• Acompaña estos manjares con algo de verdura o ensalada. Así te aseguras unos nutrientes extra y menos cargo de conciencia.
• Si eliges chorizo, búscalo de buena calidad y que sea más magro, aunque, bueno, sigue siendo chorizo.

Recuerda que el truco está en disfrutar de estas delicias en su justa medida y siempre, dentro de una dieta variada y equilibrada. ¡Buen provecho y a seguir disfrutando de lo bueno de la vida!