Pastel de Carne con Jamón: Receta Fácil y Deliciosa

¡Aquí tienes lo que necesitas!

¡Vamos a darle caña a esa carne!

1. Amasado y condimento

Para empezar, en un bol gigante (¡y cuando digo gigante es gigante!) mezcla las carnes picadas de ternera y cerdo. Echa un chorrito de leche, que esto no es un cementerio de carne, queremos suavidad y jugosidad. Ah, no te olvides de la sal y la pimienta, que sin ellos no hay paraíso gastronómico.

Añade también el pan rallado, los dos huevos y ese toque mágico que da el perejil. ¿Quieres secretito? ¡Pica el perejil superfino, como si no hubiera un mañana!

2. Sofrito de sabor

Coge la cebolla y los ajos y pícalos como si estuvieras en una misión ninja, pero sin pasarte de listo, que no queremos puré. Dale caña en una sartén con aceite hasta que se doren. Y después, ¡a la mezcla que va!

3. Integración y jamoneo

Una vez que tengas esa mezcla hecha un poema, es hora del jamón cocido. Porque todo es mejor con jamón, ¡hasta los días malos! Así que, añade esos taquitos de felicidad y mezcla hasta que se repartan por toda la carne como alegría en una fiesta.

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¡Hornea y que no se te queme nada!

Prende el horno a 180 °C con amor y cariño, que luego queremos un pastel, no carbón. Usa un molde (de esos bonitos para que quede 'instagrammable') y empieza a poner tu mezcla bien presionada. ¿Y qué haces si te sobra carne? Pues otro mini pastel, ¡obvio!

Al horno sin miedos

Mete el molde al horno esperanzado por unos 50-60 minutos. Si tienes dudas de si está hecho, pincha con un cuchillo y si sale limpio, ¡bingo! Si no, paciencia, mi joven Padawan cocinero.

¡Un descansito y a servir!

Cuando el pastel esté doradito y con pinta de “cómeme”, sácalo y déjalo reposar un poco para que se asienten los sabores. Aunque te entiendo, la cocina huele a gloria y el estómago pide guerra. ¡Pero aguanta!

¿Y ahora qué? ¡A sacar las mejores rebanadas!

Corta ese pedazo de arte culinario en rebanadas que hagan justicia a tanto esfuerzo y sírvelo con unos pimientos del piquillo por encima. ¿Qué? ¿Te ha quedado para foto o qué?

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El toque maestro

Un pequeño truco para cerrar con broche de oro: si quieres darle un plus, acompáñalo de una salsa casera o tu mayonesa favorita. ¡Ahora sí, a disfrutar de ese pastel de carne que seguro ya te está haciendo ojitos!